El vehículo eléctrico está aquí para quedarse. Es una realidad y cada día podemos ver más en nuestras calles. Se trata de una tecnología nueva en el mercado y viene con una terminología y conceptos nuevos que necesitamos. Y muchos de nosotros no estamos familiarizados con ellos.
En este artículo vamos a repasar los principales elementos que diferencian un vehículo eléctrico de uno de combustión. Así, podremos entender de lo que estamos hablando y de paso hacer la compra más inteligente.
Al igual que al comprar un coche o moto de gasolina nos fijamos en el motor, la potencia, el consumo... En un vehículo eléctrico debemos fijarnos en 2 componentes clave:
Batería
Hay muchos tipos de baterías, pero vamos a referirnos a la tecnología de iones de litio que es la más común en vehículos eléctricos hoy en día.
La batería es el "depósito de gasolina" de un vehículo eléctrico y está construida con celdas electroquímicas. Estas, almacenan la energía eléctrica que hace que se mueva el coche o moto.
Básicamente, una batería de litio está compuesta de un montón de "pilas", parecidas a las que usamos en casa para el mando del televisor. Dichas pilas están soldadas en serie y/o en paralelo en función de la configuración que queramos darle como explicamos en otro artículo de nuestro blog.
Un elemento muy importante a tener en cuenta es el fabricante de las celdas. Hay una diferencia sustancial de calidad y durabilidad entre primeras marcas: Samsung, Panasonic o LG respecto a otros fabricantes genéricos. Por lo tanto, trata de averiguar (si no lo publicitan explícitamente) la marca de las celdas que usan en las baterías de sus vehículos. Una buena batería es sinónimo de calidad.
En cuanto a terminología y simplificando los conceptos, al igual que en un coche de gasolina medimos el tamaño del depósito en litros. En el caso de la batería, la capacidad se mide en kilowatioshora (kWh) y depende del voltaje (V) y el amperaje (Ah) de la misma.
Es decir, en el caso de nuestra moto eléctrica NEXT NX1, equipa baterías con celdas Samsung de 60V20Ah y una capacidad de 1,4kWh.
Motor vehículo eléctrico
Es el otro elemento clave y su potencia se mide en kilowatios (kW).
Sin embargo, a diferencia de los motores de combustión, esta potencia en kilowatios no determina el rendimiento del vehículo.
Es decir, no por tener un más kW, el coche o moto va a ser más potente.
Esto se debe a que la cifra de kW hace referencia a la potencia máxima que admite el motor sin dañarse, y realmente el rendimiento del vehículo viene determinado por el amperaje (A) de la batería.
Por lo tanto, si quisiéramos aumentar las prestaciones de nuestro vehículo eléctrico, bastaría con sustituir la batería por una con más amperaje disponible. Esto siempre y cuando el motor sea capaz de admitir esa potencia extra.
Por último, pero no menos importante, entre el motor y la batería está conectado el Driver, también conocido como ECU o centralita.
Este driver es el cerebro que gestiona todo lo que ocurre en el vehículo: desde las luces, a la información que se muestra en el display. Pero lo más importante es que regula la cantidad de energía que va desde la batería al motor y, por tanto, define la curva de entrega de potencia.
Esperamos que con esta guía te hayas podido familiarizar con los componentes técnicos de un vehículo eléctrico.
Si quieres conocer más elementos en los que fijarse a la hora de comprar una moto eléctrica, puedes leer este otro artículo de nuestro blog.
Y si lo tienes claro, descubre todas las ventajas que te aporta en tu día a día moverte en una moto eléctrica como la NEXT NX1. O descubre todas las ventajas de una movilidad eléctrica aquí.
¡No te lo pienses más y da el salto a una movilidad sostenible!
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